Loading Now
×

Luchas del tricolor

Foto-por-Gobierno-de-Mexico-_8M

Luchas del tricolor

Karla Alejandra Rojas López

Este 8 de marzo, la manifestación de las mujeres en México se hizo escuchar una vez más, así como también la aparición de aquellos que no les importa escuchar.

México tiene, desgraciadamente, un 48% de mexicanas que dicen haber sido víctimas de agresión o acoso sexual, en una encuesta realizada por Enkoll para EL PAÍS y W Radio, Y UN 19% dice haber sufrido de agresión en su hogar.

Con estos porcentajes algunas personas piensan que no es gran cosa, ya que, en diferentes marchas de otras ciudades de México, donde llevaron a cabo una manifestación, siempre se ven casos de la irrupción de hombres y también mujeres que tratan de alzar la voz sobre ellas para callarlas, exigirles silencio, algo que para otras mujeres que apenas se animan a levantarse comienzan a temer y huir.

Los gobiernos siempre han tratado de refrenar las acciones del pueblo que perturben la aparente paz que se ve en nuestro país, para darnos la apariencia de que esta bien, que siempre ha estado bien, pero los mexicanos han estado levantando la vista y señalar lo que no se quiere soportar. Durante el año 2023, se registraron 3,439 mujeres víctimas de feminicidio y homicidio doloso, y lo que no tranquiliza a las mujeres mexicanas que, tanto propensas a ser victimas directas como de que sus hijas y otras familiares sean una parte más de estas estadísticas.

Como mexicana, pienso que esto ya no es solo responsabilidad del gobierno, al que siempre se escucha que es responsable, si, definitivamente el gobierno y las autoridades responsables de la seguridad de la población de este país es muy responsable de que estos números todavía sean altos, y que los actos realizados para combatirlos no se vean muy efectivos a los ojos de los afectados, pero México no es solo gobierno, México es la gente, son las comunidades, las acciones, los pensamientos que tenemos en conjunto como personas de un país. Dado que, las practicas anti marchas y otras formas de represión que se llevan a cabo por las mismas personas que deberían apoyarse, eso es lo que tenemos que arreglar.

Las personas, como individuos, tenemos ideas y opiniones diferentes, no somos todos iguales, pero justificar un acto de violencia hacia una persona por algo en lo que no estamos de acuerdo, una disparidad de ideas, o el hecho de realmente ser individuos diferentes, eso no debería ser parte de lo que haya que ser parte.

¿Pueden los mexicanos realmente cambiar algo como esto? Es esperanzador pensar que sí. Otras ideas pueden pensar que no es así, que pensar en que podemos cambiar algo tan grande y que ha tenido un impacto significativo en la vida desde hace muchos años es incambiable, una mira muy “utópica” de lo que queremos como futuro. No siempre tiene que ser utópico, y tampoco nada tiende a ser cien por ciento erradicado, deja secuelas. ¿Significa eso que tenemos que abandonar esas ideas que podrían realmente convertirse en algo? Los mexicanos deberían pensar que no, así como cualquier otro sueño, idea, una meta que alcanzar en la vida, una mirada a un futuro que aleje las violencias y que conserve la esperanza para un país de primer mundo no es algo que se deba tirar tan fácilmente, así como no tiras algo valioso a la basura solo porque ya no es del año.

Las opiniones difieren, y las ideas de qué y cómo debemos alcanzar estas cosas que tanto anhelamos también, pero como residentes de este país que compartimos y seguro que la mayoría siempre han estado orgullosas y orgullosos de pertenecer, debemos pensar en cómo cuidarlo.

Share this content:

Post Comment